¡Otoño! ¿Puede este cambio de estación afectar a nuestra salud digestiva?
¡Parece que no ha terminado el verano y ya hemos puesto un pie en otoño! ¿Puede este cambio estacional afectar a nuestra salud digestiva? Analizamos un poco la situación para poder llegar al fin de la cuestión.
¿Qué suele pasar habitualmente cuando pasamos de verano a otoño? Exacto, se terminan las vacaciones, los días se acortan, comenzamos la vuelta a nuestros quehaceres diarios y normalmente el tiempo empeora. Esto significa que nuestro organismo requiere de un proceso de adaptación durante un periodo de tiempo. Además, tenemos menos tiempo para hacer las cosas, nuestro ritmo de vida puede verse acelerado, empezamos con las obligaciones laborales, escolares, tenemos menos horas de sol y debido a esto tenemos más desgaste tanto físico como mental.
Pasamos de estar en nuestras relajadas vacaciones, a un pequeño “caos” producido por la vuelta a la rutina. Esta situación puede provocarnos alteraciones que dificulten la adaptación de nuestro cuerpo a los cambios que supone el cambio estacional, lo que podría causar un estrés vinculado a este cambio de estación.
¿Qué puede ocurrir en esta situación? Que debido a la falta de tiempo, sobre todo al inicio de la adaptación, descontrolemos un poco nuestra dieta y cometamos una ingesta inadecuada. No tenemos tiempo, y podemos caer en el error de tener una dieta inadecuada y poco equilibrada. Menús copiosos, sin horario regular y comidos de la manera más rápida posible. Todo esto, además de posiblemente reducirnos las defensas debido a carencia vitamínica y de nutrientes, podría empeorar nuestras digestiones y producirnos gases.
De esta manera, podemos concluir que no es el cambio estacional en sí lo que puede afectar a nuestra salud digestiva, empeorando las digestiones y aumentando los gases, si no la situación que provoca el hecho de pasar de verano a otoño. Sobre todo, el hecho de tener menos tiempo para llevar una dieta equilibrada y unos horarios regulares.
Según la Dra. Isabel Blázquez del servicio de aparato digestivo del Hospital Universitario de Torrejón, los cambios estacionales y los periodos de estrés emocional son los principales detonantes de los síntomas clínicos de la dispepsia. Recordemos que la dispepsia es una afección común que puede suceder cuando el cuerpo tiene dificultades para digerir la comida, es decir, para completar la digestión, lo que puede provocar dolor o molestias en la zona del abdomen.
Dicho todo esto, podríamos decir que en el cambio de estación de verano a otoño, nos vemos en una situación en la que nuestra salud digestiva podría verse comprometida. Por lo que recomendamos tener especial cuidado en llevar una dieta equilibrada, y procurar alejar el estrés.