Smoothies para combatir el calor
Seguimos con un poquito de gastronomía y en este caso también hablaremos de armas para combatir el calor y refrescar un poquito el verano. ¡Smoothies! ¿Os suenan? Son tradicionalmente combinaciones de fruta helada. Actualmente también adquieren el nombre de smoothies los batidos a los que se les añade algún lácteo como el yogurt o trozos de hielo y adquieren una textura cremosa. No dejan de ser batidos muy fríos para darle un toque fresco extra y revitalizar los paladares.
A estas alturas habrá cientos de recetas diferentes rondando por Internet pero nosotros vamos a proponer unas cuantas sencillas para poder hacer en un momento y poder disfrutar de todo el sabor de sus ingredientes. Sencillas pero a nuestro parecer perfectas…
Limón y leche condensada
Si os gustan estos dos ingredientes tenéis que probarlo. Primero hay que mezclar en un bol un bote pequeño de leche condensada con el zumo de tres limones y 400 ml de leche evaporada. Lo moveremos un poco con unas varillas para que los lácteos tomen apariencia cortada y después batimos a toda velocidad para que el batido adquiera ese toque cremoso que queremos conseguir. Bastará con servirlo bien frío y con algún fruto rojo para lograr un perfecto contraste de sabores.
Green Smothie
Este que vamos a presentar quizás no sea para todos los públicos porque lleva espinacas. 350 gramos de fruta congelada a elección del que lo haga, 1 platano troceado, un puñado grande de espinacas frescas lavadas y secas y 350 ml de leche de almendras. Solo tendríamos que echarlo al vaso de batidora con el endulzante que queramos y batir hasta lograr la textura que deseemos. Si vemos que queda muy espeso solo tenemos que añadirle un poco más de leche de almendras. ¡Ideal para personas intolerantes a la lactosa!
Tropical
Pera, piña, leche de coco, yogurt, leche (la que se prefiera) y cuatro hielos es todo lo que hace falta para elaborar este refrescante brebaje tropical. Utilizaremos una piña, tres peras, la leche de un coco, un yogurt natural y media taza de leche. Como en la mayoría de estas mezclas bastará con batirlo todo hasta dejarlo en el punto que queramos. Si no nos es suficiente con el dulzor natural de la fruta que cada uno lo endulce con el producto que más le guste. Pero sin pasarse, se trata de saborear la esencia de la fruta sin camuflarla con azúcares añadidos.
Smoothie de frambuesa o fresa y chocolate
Para terminar vamos con uno un poquito más elaborado pero que seguro que os entran ganas de probar. Si os gustan más las fresas que las frambuesas no dudéis en sustituir los ingredientes. Necesitaremos 400 g de una de las dos frutas,150 g de nata líquida (baja en grasa), 650g de leche entera y 300g de chocolate con leche. La receta también es sencilla pero es algo más trabajada que las anteriores. Trituramos la fruta que hayamos elegido y la hervimos junto a la nata y la leche 10 minutos. Después derretiremos el chocolate como deseemos, ya sea en el microondas o al baño maría, y lo mezclaremos con la crema de frambuesas con una varilla hasta emulsionarlo. Solamente queda distribuirlo en copas y enfriarlo en la nevera para que esté listo.
Ya hemos visto que con un poquito de esmero podemos convertir esas tardes de calor en perfectos días refrescantes. ¿Os atrevéis a probar con estas recetas y a experimentar con las vuestras propias?