Dieta de 1.500 calorías para la vuelta de las vacaciones
Seguro que muchos ya habéis disfrutado las vacaciones de verano, ¿verdad? Y claro que sí, seguramente hemos venido con unos kilitos de más. ¿Qué hacemos ahora? Toca cuidar un poquito lo que nos metemos a la boca… Nosotros vamos a proponer la dieta de las 1.500 calorías, ya que es una dieta que no priva de ningún tipo de nutrientes al organismo. Por lo que en principio, no se corre ningún riesgo al llevarla a cabo.
Lógicamente, antes de recurrir a cualquier tipo de cambio en la dieta con objeto de adelgazar, lo recomendable es acudir a un especialista para estar completamente seguros de que la actividad llevada a cabo vaya a ser segura. Mejor prevenir que curar.
Os informamos también que no es una dieta a seguir durante un largo periodo de tiempo. Aunque no aparte estrictamente ningún alimento, es una dieta hipocalórica y en ella la ingesta de calorías está muy por debajo de las recomendadas. Por lo que, se hace en un periodo en el que se quiera adelgazar. Insistimos, siempre bajo supervisión de un especialista para no tener ningún riesgo.
Por qué elegir la dieta de las 1.500 calorías
Es una dieta hipocalórica pero no es excesivamente restrictiva, por lo que no aparta ningún tipo de alimento de la dieta diaria de forma drástica. Es una dieta completa, variada y equilibrada que permite elaborar los menús con una amplia variedad de productos. Por lo que al contrario de otras dietas, no te cansas tan deprisa de estar a régimen.
Como hemos dicho antes, no restringe estrictamente ningún tipo de alimento, pero las proteínas son protagonistas en el día a día. Lógicamente, las grasas y los hidratos las tendremos que tener bien controladas sin apartarlas de nuestra dieta.
Vamos con unas cuantas indicaciones que tenemos que tener claras antes de ponernos serios con esta dieta:
- Haremos 5 comidas diarias y no podremos saltarnos ninguna. Esto nos ayudará a controlar el apetito y a mantener la ansiedad a raya.
- La comida más potente del día es el desayuno, y de ahí en adelante vamos reduciendo la ingesta calórica hasta hacer una merienda y cena ligeras.
- Tenemos que tener claro que no podemos añadir calorías a los alimentos. El aceite, la harina, los rebozados… quedan descartados. Vamos a procurar cocinar a la plancha o al horno para reducir la ingesta de aceite y sobre todo, evitar los rebozados, enharinados, empanados… Las salsas también las colocaríamos fuera de nuestras posibilidades, ya que añaden grasas derivadas de las natas, tomate frito, mantequilla…
- La dieta se basa en la alta ingesta de frutas, verduras y hortalizas, y proteínas tanto de origen animal como vegetal. Las carnes que incluiremos serán blancas y magras. Podemos comer también carnes rojas, pero sin caer en la tentación de comer la grasa. En cuanto al pescado, lo comeremos en mayor medida blanco, pero también podemos incluir pescado azul un par de veces por semana. Al tener grasas saludables, contienen más calorías que el resto.
- Tenemos que adaptarnos a formas de cocción con menos grasa. El freír y guisar lo vamos a dejar para otra etapa de nuestra vida… ahora nos centramos en usar la plancha, cocer, o cocinar al horno. Siempre usando la menor cantidad de aceite posible.
- Reducir el consumo de sal evitará que retengamos líquidos.
- Tenemos que eliminar los azúcares simples de nuestra dieta en la medida de lo posible. Alcoholes, refrescos, gominolas… todos aquellos productos con alto contenido de azúcares añadidos fuera.
- ¿Cuánta agua soléis beber al día? Deberemos consumir dos litros diarios, pudiendo sustituir parte de ello con tés e infusiones sin azucarar.
En este enlace de OCU podéis encontrar una planificación para llevar esta dieta durante dos semanas. A continuación os ponemos un ejemplo de lo que sería la comida diaria para esta dieta:
Desayuno: Un café o té con leche semidesnatada, un vaso de zumo natural de naranja y media rebanada de pan con queso fresco y dos lonchas de jamón york.
Media mañana: Un par de ciruelas o un yogur desnatado.
Comida: Un plato de arroz (25 gr) caldoso con verduras (200 gr) y una ensalada completa (200 gr).
Merienda: Una manzana.
Cena: Pescado (180 gr) al horno con verduras (150 gr) y una patata.
Viendo el ejemplo podéis ver qué tipo de dieta vamos a trabajar. Una muy variada y de cantidades reducidas. No os olvidéis compaginarla con algo de deporte para tener un buen estado físico. ¡Que aproveche!